En el volumen 8 de esta colección de Pop History, ya presentamos a Ginger Baker en algunas de sus facetas. Ahora toca hablar de su época con la “Ginger Baker's Air Force”.
La banda se formó a finales de 1969 tras la disolución de Blind Faith. La formación original consistía en Ginger Baker a la batería, Steve Winwood al órgano y voz, Ric Grech al violín y al bajo, Jeanette Jacobs a la voz, Denny Laine a la guitarra y a la voz, Phil Seamen y Alan White a la batería, Chris Wood al saxo tenor y a la flauta, Graham Bond al saxo alto, Harold McNair al saxo tenor y a la flauta y Remi Kabaka a la percusión.
La banda lanzó dos álbumes, ambos en 1970: Ginger Baker's Air Force y Ginger Baker's Air Force 2.
El segundo álbum involucró personal sustancialmente diferente al primero, siendo Ginger Baker y Graham Bond las principales constantes entre los álbumes.
Esta información, y mucha más, se puede conseguir en la red sin ningún problema. Como algunos compañeros han contado su anécdota en relación al grupo que presentaban, y animaban a que los demás contaran la suya, ahí va la mía. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia, o no.
"A principios de los años 70 trabajaba en Madrid, en el Centro de Proceso de Datos de un banco importante en aquellos tiempos. Todos tenemos un pasado. Manejaba una máquina perforadora informática. De aquella máquina salían las tarjetas perforadas que contenían un código binario para ingresar información a una computadora. La computadora de aquel entonces era casi tan grande como una habitación. Desde ese enorme edificio pudimos oír la explosión del atentado de ETA a Carrero Blanco. Pero no van por ahí los tiros. Nosotros (Mavi, mi amigo Antonio y yo) vivíamos en el Barrio de Malasaña, en una buhardilla de lo más típica, con su claraboya para salir al tejado y contemplar los atardeceres en primavera. Pues bien, una tarde, después de haber vuelto del trabajo y comer cualquier cosa, alguien puso en el plato del tocadiscos el primer disco de Ginger Baker's Air Force. Ya le habíamos quitado el tapón a la botella de coñac Terry, el de la malla amarilla. Llené mi copa de plata (o lo que fuera aquel metal) comprada en el rastro que parecía un cáliz. La música seguía sonando hasta que llegó el solo de batería; en mitad del solo oímos, a duras penas, que alguien llamaba a la puerta. Pensamos que era la policía, que alguien había llamado por el ruido, pero no, eran nuestras dos vecinas gallegas viejecitas, regordetas, vestidas de negro riguroso, con una olla de esas rojas llenas de castañas asadas por ellas, que nos ofrecían con toda su amabilidad. Les dimos las gracias y nos dimos el atracón de castañas asadas y de solo de batería de Ginger Baker. Ahora, cada vez que suena la Air Force, me acuerdo de las castañas asadas y de las dos viejecitas gallegas."
https://www.mediafire.com/file/394valbsltrzvv8/Pop+History+Vol.+17+-+Air+Force+(Spain+Edition).rar/file
ResponderEliminarCómo me gusta, leche! Muchísimas gracias!!!!
ResponderEliminarGracias a ti, Miguel. Este señor tiene sus más y sus menos, como todo quisqui. Nos quedaremos con lo bueno.
EliminarSaludos.
Hola Bab:
ResponderEliminarPues toda una eminencia este señor, aunque a veces se haga insoportable con esos interminables solos de batería tan de moda en esos años, menos mal que se pasó, pues si no eran en directo, eran insufribles.
El elenco de músicos de lo mejorcito, y los dos discos en su tiempo estaban bien, pero ahora cuesta bastante mas de digerir, aunque acompañados de castañas igual entran mejor, habrá que hacer la prueba.
Saludotes
Jose
Casi todos coincidimos con el Baker y su Air Force. Me pasa lo mismo que a ti, ahora cuesta un poco más asimilarlo. Las castañas asadas pueden ayudar algo, sí. Con la calima que tenemos encima...
EliminarSaludos.
Esa maquina de tarjetas ,
ResponderEliminaren este blog , de lo mejor
que he visto desde lo sigo,
dejando a un lado lo musical.
Orlando, había que ilustrar el relato. Manejé esa máquina un tiempo cuando era un pipiolo. También "manejé" la botella de Terry: había que desconectar del trabajo (y de la maquinita) por las tardes y noches de alguna manera.
ResponderEliminarGracias.
Saludos.
Hombre, que
Eliminarno falte el
trago, claro
Menos mal que ya no hace falta... de momento, porque con la que está cayendo.
EliminarRepasando a los miembros de la banda se me ocurre pensar que esta primera formación de la Air Force no deja de ser una continuación de los míticos Blind Faith, eso sí, con la incorporación de unos músicos de contrastado renombre (el Bond de la GBO, el Laine de Wings, el White de Yes, el Wood de Traffic...) ¡menuda peña!, así cualquiera factura una obra parecida a la obra de arte. Pero tengo la sensación que nuestro amigo Baker desaprovechó la ocasión...
ResponderEliminarLa anécdota personal enriquece la visión del disco.
Saludos,
Ellos se lo deberían pasar bien tocando en directo. Siempre que el Baker no se cabreara por algún motivo. Yo disfruté bastante en su momento los dos discos que hicieron. Luego, con el tiempo, se me hacen un pelín pesado algunos temas. Winwood disfrutaba con su Hammond, y Bond, con su saxo, e imagino que cada cual con su instrumento. Y ya sabes, prueba con las castañas asadas, a ver si así entran mejor los solos de batería. O con paracetamol de 1 g.
EliminarGracias.
Saludos.
Vaya por delante que soy un ignorante acerca del trabajo de este señor, así como de los otros mencionados aquí, más allá de disfrutar con discos de Cream. Solo escribo porque hace poco vi el documental ''Beware Mr. Baker'', que se encuentra fácilmente en internet y me pareció interesante y muy disfrutable: allí se dan cita varios de estos personajes, como Graham Bond y Phil Seamen, que tanto parece que influyó a Baker desde los inicios. Muy recomendable, si alguien de aquí no lo ha visto.
ResponderEliminarUn saludo.
'Beware of mr. Baker', perdón. Que se me fue la preposición...
EliminarSí, Rodión, conozco ese documental. Estaba muy bien. Buena recomendación.
EliminarSaludos.
Por si a alguien le interesa, aquí está con subtítulos:
ResponderEliminarhttps://youtu.be/bO2nSbDA2WI
Hola babelain.
ResponderEliminarDe vueltas con el locatis del Sr. Baker.
He de reconocer que no conocía esta formación, pero en vista del plantel de músicos que la componen, creo que vale la pena darles una escucha. Siempre hay un momento para cada música. Voy a empezar por el documental que menciona Rodión para ir cogiendo ganas.
Parece que esto se acaba. Ya tengo preparada mi entrada de Bee Gees para cerrar con broche de oro. Publicaré a primeros de la semana que viene.
Buena entrada.
Saludos.
Antoni.
Ya verás cómo se las gasta el Sr. Baker en el documental. Y sí que hay un momento para cada música. Me lo pasé muy bien cuando salieron los dos discos, ahora ya no tanto, aunque a veces...
EliminarEsperamos el fin de fiestas con tu entrada sobre los Bee Gees.
Saludos.
Creo que los relatos personales le dan mucho estilo y personalidad al blog, y además de ser entretenidos, ayudan a conocernos mejor. También pienso que atraen la curiosidad de los que nos visitan esporádicamente ó por primera vez. En definitiva, que son una buena forma de atraer a nuevos seguidores.
EliminarSaludos.
Menudo choque cultural, la máquina perforadora y la botella de Terry... Qué tiempos más locos, aquellos.
ResponderEliminarHay que reconocer que los de nuestra quinta, de chavales, nos tragábamos cada tocho que asusta. Pero en fin,. siempre podremos presumir de que teníamos una formación musical muy "profesional".
La botella de Terry haría una pareja imbatible con la olla de castañas. Otoño puro. Qué ricas...
Tú lo has dicho, Rick, tiempos locos, pero con enjundia. Éramos tan jóvenes.
ResponderEliminarNo me hables del Terry, que me bebí unos cuantos kilolitros en pocos años. Lo de las castañas es otra cosa. Aún puedo disfrutar de ellas, no tienen tanto peligro.
Saludos.